Hábitos que dañan tus dientes y cómo corregirlos a tiempo
- Diana Montoya Guzmán

- hace 5 días
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Nuestra sonrisa habla por nosotros antes de decir una sola palabra. Sin embargo, muchas veces cometemos pequeños errores diarios que deterioran la salud dental sin que lo notemos. Detectar estos hábitos a tiempo y corregirlos puede evitar tratamientos complejos en el futuro y, sobre todo, preservar la estética y funcionalidad de nuestra boca.

1. Morderse las uñas
Este hábito, que suele relacionarse con la ansiedad, ejerce presión excesiva sobre los dientes frontales. Con el tiempo puede causar desgaste, microfracturas e incluso afectar la alineación dental. Sustituir el hábito con técnicas de control del estrés o mantener las uñas cortas puede ser el primer paso para evitar el daño.
2. Usar los dientes como herramientas
Abrir empaques, cortar cintas o destapar objetos con los dientes es una de las causas más frecuentes de fracturas dentales. Para prevenir accidentes, siempre utiliza tijeras o herramientas adecuadas. Los dientes están diseñados para masticar, no para sustituir a un cuchillo.
3. Cepillarse demasiado fuerte
Aunque parezca contradictorio, cepillarse con demasiada presión o con un cepillo de cerdas duras puede desgastar el esmalte y lastimar las encías. Lo ideal es usar un cepillo de cerdas suaves y movimientos circulares delicados, dedicando al menos dos minutos a la higiene bucal.
4. Consumo excesivo de bebidas azucaradas o ácidas
Los refrescos, jugos industriales y bebidas energéticas erosionan el esmalte y generan caries. Lo recomendable es reducir su consumo, enjuagarse la boca con agua después de ingerirlas y no cepillarse de inmediato, ya que el esmalte queda temporalmente debilitado.
5. Rechinar o apretar los dientes (bruxismo)
Este hábito, muchas veces inconsciente y relacionado con el estrés, puede causar desgaste dental, dolores de mandíbula y hasta problemas en la articulación temporomandibular. El uso de férulas nocturnas y técnicas de relajación suelen ser una solución efectiva.
6. Olvidar el hilo dental
El cepillado por sí solo no elimina la placa entre los dientes. El uso diario de hilo dental evita la acumulación de bacterias en zonas difíciles de alcanzar y reduce el riesgo de caries y enfermedades periodontales.
7. Saltarse visitas al odontólogo
La prevención es siempre más económica y menos dolorosa que el tratamiento. Asistir a revisiones periódicas permite detectar problemas en fases tempranas y tratarlos de manera más sencilla.
Conclusión
Cuidar tu sonrisa no se trata solo de tener dientes blancos, sino de mantener hábitos saludables que la protejan a largo plazo. Identificar y corregir a tiempo estas costumbres dañinas marcará la diferencia en tu salud oral.
Si notas que algunos de estos hábitos forman parte de tu rutina o ya presentas molestias en tus dientes o encías, agenda una valoración con la Dra. Diana Montoya en Bogotá. Tu sonrisa merece la mejor atención, y estás a tiempo de protegerla.



